El arte urbano
La transformación de las ciudades

El arte en el espacio urbano es bastante más que paredes de muchos colores: es también un elemento básico del cambio social. Dos proyectos de arte callejero, en Colonia y en Düsseldorf, abogan por más participación y cohesión social.

De Johannes Zeller

De paseo por el distrito colonés de Ehrenfeld, resulta difícil pasar por alto los artísticos graffiti con los que fachadas enteras de edificaciones se han transformado en obras de arte ultradimensionadas. Las pinturas se extienden por varias plantas de las casas: desde una fachada, un hombre-mazorca mexicano contempla allá abajo a quienes transitan por la calle, en otro lugar cuelga del techo una liebre desollada, dos calles más allá un tanque lleno de juguetes “Made in China” va a arrollar a un hombre que lleva bolsas de comercio justo. Los motivos van de lo fantástico a la crítica social, de lo serio a lo grotesco.

Los numerosos murales, pintados por artistas internacionales, son ya desde hace largo tiempo una seña de identidad del barrio, pues no en vano han convertido calles grises en una galería artística urbana. No solo podemos contemplarlos aquí, sino que también por la ciudad entera encontramos paredes sin ventanas transformadas en pinturas gigantescas que ya forman parte esencial del paisaje urbano. El cambio debe atribuirse ante todo al CityLeaks Urban Art Festival, que, desde 2011, transforma cada dos años las calles de Colonia en un foro internacional de arte urbano que en cada ocasión deja tras de sí en la ciudad huellas visibles de su paso.

Aún más tupida, y no menos rica artísticamente, resulta la ambientación de la Kiefernstraße de Düsseldorf, quizá la zona de arte callejero más conocida de la ciudad. La calle se abre paso entre fachadas llenas de formas artísticas, pinturas murales y firmas llenas de colorido. También aquí, el arte ha transformado la estética urbana hasta el punto de conferir un carácter nuevo a la ciudad, y también aquí ha sido gracias a la contribución de un festival de arte. En el 40grad Urban Art Festival, artistas callejeros jóvenes muestran sus ideas en acciones pictóricas ante la vista del público. No solo, aunque también, en la Kiefernstraße.

Obras de arte en vez de fachadas grises

Mediante el graffiti, la performance callejera, instalaciones y otras modificaciones de la vida urbana habitual, las y los artistas influyen en nuestra vivencia de las ciudades. Sus obras ocupan una posición y la defienden, llegando a veces incluso a causar cambios en realidades sociales. Tal como explica gráficamente Georg Barringhaus, del CityLeaks de Colonia, ese carácter unificador y transformador es también el motor que impulsa el festival: “El arte urbano abre el acceso a espacios de la ciudad”, afirma su director artístico. El arte hace visible lo invisible y vincula entre sí a las personas independientemente de su procedencia, estatus o medio social.

La organización de CityLeaks corre a cargo de artrmx e.V. en colaboración con artistas, estudiosos/as y el vecindario. En cooperación mutua se planifican así exposiciones, intervenciones, recorridos guiados y publicaciones. El público visitante, además, tiene disponible la página web de CityLeaks si quiere informarse sobre la localización de obras artísticas concretas y marchar así de exploración para contemplarlas. Así es como, a la vez, ha surgido también una nueva oferta de ocio, que ha dado poder de atracción a rincones urbanos en los que apenas nadie antes se fijaba.

Ofrecer un acceso semejante a la reconfiguración del espacio público es también el objetivo del Festival 40grad Urban Art de Düsseldorf, que convoca a adolescentes y artistas particularmente jóvenes. En sus acciones pictóricas coordinadas, las personas participantes hacen surgir así cada dos años graffiti nuevos en toda el área urbana, habiendo conseguido desde 2013 que incontables superficies grises repartidas por todo Düsseldorf se hayan transformado en obras artísticas impactantes. La organización del 40grad Urban Art corre a cargo de vecinas y vecinos de Düsseldorf comprometidas con la iniciativa en colaboración con distintas organizaciones infantiles y juveniles. El objetivo de su actividad conjunta es trabajar para que la juventud disfrute más oportunidades de participar en la configuración de la ciudad.
 

El arte urbano, objeto de discurso y de investigación

Con todas sus implicaciones en el desarrollo de espacios en las ciudades –y, por lo tanto, también para la vida cotidiana de sus habitantes–, el arte urbano es asimismo objeto de discusión en los campos científico y público. Pensando específicamente en ello, el Festival CityLeaks organizó un congreso sobre discursos del desarrollo urbano, que supuso el nacimiento de la Academia CityLeaks. Esta plataforma interdisciplinar para la investigación de la ciudad congrega a artistas e investigadoras/es y a la opinión pública para repensar y reconfigurar conjuntamente la ciudad.

“¿Qué mantiene con vida una ciudad y la hace, antes que nada, digna de ser vivida?”. A este tema y otras cuestiones, explica Margrit Miebach, directora del festival, se enfrenta esta plataforma de discusión. “¿Cómo y en qué se muestra su diversidad y cómo se la puede mantener? ¿Cuál es la manera para reclamar y reivindicar en común el derecho a la ciudad?”

Son preguntas todas ellas que no podemos pasar por alto cuando pensamos sobre el presente y el futuro de las ciudades. Pues es, precisamente, en los espacios abiertos tales como parques, plazas, paseos ribereños y calles donde se manifiestan las contradicciones, intereses y demandas de una sociedad urbana. El arte urbano puede aportar estímulos para dilucidar las estructuras urbanas, comentarlas y reinventarlas.