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Viaje por Alemania

SINOPSIS

Un viaje a través del tiempo en Alemania del Este, 30 años después de la reunificación y tras la primera gira cinematográfica del director y el camarógrafo por la desaparecida RDA: ¿qué queda de las esperanzas, los miedos y los cambios? 
 
Pocos meses después de la caída del Muro, en noviembre de 1989, el director alemán Wolfgang Ettlich y su camarógrafo Hans-Albrecht Lusznat emprendieron un viaje cinematográfico hacia lo desconocido, que desde entonces han repetido varias veces y que ahora emprenden por última vez: un curioso viaje por carreteras de las provincias de Alemania del Este se ha convertido en una road movie, un documento del tiempo. Ettlich y Lusznat visitan a las personas a quienes también entrevistaron en 1989 y se preguntan por las esperanzas y los temores de la época: ¿se hicieron realidad? ¿Estaban justificados? ¿Cómo fue el camino hacia el capitalismo? Él mismo dice: "No se puede hablar de Dresde, Leipzig o Chemnitz; pero en las ciudades pequeñas, en la frontera con Polonia, la gente se va a Occidente. Y, de hecho, siempre es un problema el hecho de que Alemania no haya conseguido crear una igualdad económica". 
Los cambios se han inscrito en las biografías y los rostros de las personas, en los lugares, los paisajes y -por cierto- también en la estética cinematográfica, debido al progreso técnico.  
 

DIJO LA PRENSA:  

“Ettlich viaja junto con su fotógrafo, Hans-Albrecht Lusznat, a la República Democrática Alemana (RDA) en decadencia poco después de su reincorporación a la República Federal Alemana, ‘una expedición a una tierra desconocida’, dice. ‘Cuando cayó el muro tuve que ir a ver, crecí cerca del muro en Neukölln y caminé muchas veces a Berlín Oriental para comprarme un refresco por 20 peniques’. Sus vivencias en lugares como Zittau, Zschopau, Forst o Chemnitz lo acompañarán para siempre. (…) El cambio se vuelve visible en contraste con las viejas filmaciones. No se trata solo de la transformación externa, sino también de la interna –el efecto de la reunificación en la gente-. La intensiva búsqueda de los trazos del estado de ánimo a veces está impregnada de nostalgia, así como de esperanza y decepción. La antigua alcaldesa del partido SED lamenta: ’antes éramos una familia, ahora ya no funciona nada’; una pareja de maestros dice: “nunca quisiéramos regresar a la RDA, eso sería la última opción’; el vendedor de la pollería juzga en tono de Salomón: ‘Algunos encontraron la felicidad, y algunos otros no.’” (Margret Köhler, Abendzeitung -Múnich-, 26.10.2020)