Acceso rápido:

Ir directamente al segundo nivel de navegación (Alt 3) Ir directamente al primer nivel de navegación (Alt 2)

Nuevo cine alemán
Cambiar la mirada sobre Alemania

Fortuna para el cine alemán: Toni Erdmann de Maren Ade recibe una ovación de pie en el Festival de Cannes de 2016.
Fortuna para el cine alemán: Toni Erdmann de Maren Ade recibe una ovación de pie en el Festival de Cannes de 2016. | Foto (detalle): © picture alliance/dpa/Cannes Film Festival

Una nueva generación de realizadores está poniendo su marca en el cine alemán: perspectivas interculturales, modos de narrar originales y nuevos abordajes estéticos.

Después de que Toni Erdmann recibiera una ovación de pie en el Festival de Cannes de 2016, pasó algo extraordinario. Si bien en todo el mundo se aprecia el cine alemán por su historia, por la producción histórica de la época de la República de Weimar y por nombres como Rainer Werner Fassbinder o Wim Wenders, pocas son las ocasiones en que realmente se lo adora con pasión. Sin embargo, una ola de entusiasmo llevó a Toni Erdmann del estreno en Cannes a los cines alemanes, donde la vieron más de un millón de personas, y de allí a la entrega de los Oscar, en Los Angeles. La película de Maren Ade fue un hecho afortunado para el cine alemán en muchos aspectos. Entre otros, refutó la afirmación de que los realizadores de la Escuela de Berlín, a la que ella pertenece, solo hacen películas para el nicho de los cinéfilos.
 
Aunque puede resultar un poco arbitrario intentar dividir la historia del cine alemán reciente en un antes y un después de Toni Erdmann, el número de las óperas primas premiadas en los últimos años es llamativo. El actual Nuevo Cine Alemán, para usar algo forzadamente un término de la historia del cine, tiene una configuración variada. En 2018, Eva Trobisch ganó con Alles ist gut (Todo está bien), drama que aborda el tema de la violación, el premio a la mejor ópera prima del Festival de Locarno. En 2019, Nora Fingscheidt recibió por Systemsprenger (Destructora del sistema), drama juvenil, un Oso de Plata en el Festival de Berlín de 2019. Trobisch y Fingscheidt nacieron en 1983 y llegaron a sus respectivas óperas primas relativamente tarde. Eso se debe en parte a las estructuras de la industria cinematográfica alemana y a la complicada burocracia de la promoción cinematográfica, repartida entre el gobierno federal, los estados federados y los canales de televisión. Como sea, ambas realizadoras pertenecen a una generación que ha enriquecido al cine alemán con innovaciones en las perspectivas, los modos de narrar y los abordajes estéticos.

Un buen lugar para observar este fenómeno son los premios First Steps, que todos los años se entregan a las mejores películas de graduación hechas por los estudiantes de las escuelas de cine alemanas. Esta distinción, que se otorga desde 1999, ya es mucho más que un premio de futuras promesas. En 1999 lo recibió la directora austríaca Sandra Wollner con su drama intimista distópico The Trouble with Being Born, que trata del papel de la inteligencia artificial en el trabajo del duelo. En 2019, lo ganó por primera vez alguien que había filmado su película por fuera de las escuelas superiores de cine: Faraz Shariat, con Futur Drei, un film queer y posmigrante sobre la mayoría de edad. Las dos películas no pueden ser más diferentes. Si Wollner narra con imágenes frías, de composición rigurosa, Shariat, nacido en 1994, recurre a la teoría queer-feminista, poscolonial y a la iconografía del videoclip.

  • Eva Trobisch es considerada uno de los nuevos talentos del cine alemán. En 2018 ganó el premio estímulo Neues Deutsches Kino con su película <i>Alles ist gut</i>. Foto: © picture alliance/dpa/Felix Hörhage
    Eva Trobisch es considerada uno de los nuevos talentos del cine alemán. En 2018 ganó el premio estímulo Neues Deutsches Kino con su película Alles ist gut.
  • También Nora Fingscheidt tuvo la alegría de recibir una condecoración: su drama juvenil <i>Systemsprenger</i> (Destructora del sistema) ganó un Oso de Plata. Foto: ©Yunus Roy Imer/Port au Prince Pictures
    También Nora Fingscheidt tuvo la alegría de recibir una condecoración: su drama juvenil Systemsprenger (Destructora del sistema) ganó un Oso de Plata.
  • Una nueva mirada sobre Alemania: la ópera prima de Faraz Shariatt, <i>Futur Drei</i>, en el que se cuenta la relación del protagonista con sus padres que han huido de Irán, fue galardonada en 2019 con un premio First Steps. Foto: © Verleih Edition Salzgeber
    Una nueva mirada sobre Alemania: la ópera prima de Faraz Shariatt, Futur Drei, en el que se cuenta la relación del protagonista con sus padres que han huido de Irán, fue galardonada en 2019 con un premio First Steps.
  • La directora Uisenma Borchu protagoniza su propia película <i>Schwarze Milch</i> (Leche negra). Foto: © Filmverleih Alpenrepublik
    La directora Uisenma Borchu protagoniza su propia película Schwarze Milch (Leche negra).
  • La directora Sandra Wollner ganó en 2020 el First Steps Award con su drama intimista distópico <i>The Trouble with Being Born</i>, que trata del papel de la inteligencia artificial en el trabajo del duelo. Foto: © 2020 eksystent distribution filmverleih
    La directora Sandra Wollner ganó en 2020 el First Steps Award con su drama intimista distópico The Trouble with Being Born, que trata del papel de la inteligencia artificial en el trabajo del duelo.

Nuevos temas, nuevos estilos

Gracias a directoras y directores como Faraz Shariat, Uisenma Borchu, Soleen Yusef y Burhan Qurbani, nacido en 1980, también cambió la mirada cinematográfica sobre Alemania. Mientras en Futur Drei (Futuro tres) Shariat plantea como tema la relación del protagonista, nacido en el interior del estado de Baja Sajonia, con sus padres huidos de Irán, Borchu y Yusef regresan a las tierras de sus padres. En la tragicómica roadmovie Haus ohne Dach (Casa sin techo), de 2016, Yusef cuenta la historia de tres hermanos que, alejados entre sí, le cumplen al padre el último deseo: ser enterrado en Kurdistán junto a su esposa. Por su parte, Borchu en su segundo largometraje, Schwarze Milch (Leche negra), de 2020, interpreta a la protagonista que después de muchos años regresa a Mongolia e intenta llegar a un acuerdo con los modelos tradicionales que imperan allí. En Berlin Alexanderplatz (2020), Qurbani cuenta la historia de un migrante ilegal africano, que intenta hacer pie en Alemania. Todas estas películas muestran la polifonía de diferentes experiencias culturales: abandonando los estereotipos acentuados, estas obras exploran qué significan haber nacido en Alemania y así amplían el espectro temático del cine alemán.
 
El cine alemán se ha abierto también en el plano estilístico. Aquí resultó esencial el aporte sobre todo de realizadores como Julian Radlmaier con Selbstkritik eines bürgerlichen Hundes (Autocrítica de un perro burgués) (2017), Max Linz con Ich will mich nicht künstlich aufregen (No quiero excitarme artificialmente) (2014) y Susanne Heinrich con su ópera prima Das melancholische Mädchen (La muchacha melancólica) (2019). Los tres recurren a una forma estilizada, ensayística, que oscila entre la teoría cultural y la cita pop. De modo semejante a los pioneros del Nuevo Cine Alemán de los años setenta, adoptan posiciones de izquierda y a la vez no dejan de presentar con humor lacónico las contradicciones de su crítica del capitalismo. También Sophie Kluge construye un puente al Nuevo Cine Alemán con su ópera prima Golden Twenties, de 2019, en la que describe con un tono ensimismado y una poética cotidiana la historia de una mujer que vaga por la vida entre sus estudios teatrales, los conflictos con sus padres y su temor a los vínculos. En Mein Ende. Dein Anfang (Mi final. Tu comienzo) (2019), Mariko Minoguchi, otra debutante, hace que sus dos protagonistas establezcan, después de una muerte trágica, un lazo fatal que parece obedecer a las leyes de la física cuántica.

Minoguchi es autodidacta, igual que Shariat. Su ópera prima estuvo nominada este año al Premio del Cine Alemán. El cine alemán se ha abierto no sólo temática y estilísticamente: ahora ofrece también como carrera ofrece muchas vías de ingreso.

Top