Series alemanas  1899: ¡bienvenidos al crucero (de las pesadillas)!

Darsteller und das Produzentenpaar Baran bo Odar (Regie) und Jantje Friese (Drehbuch) der Netflix Serie 1899 auf dem Set mit dem © Netflix, Foto: © Rasmus Voss

El alboroto que precedió al estreno fue enorme: “1899” había costado casi cincuenta millones de euros y así era la serie alemana más cara de la historia. El exitoso equipo creador de la famosísima serie “Dark” había prometido más misterio, más suspenso, más enigmas. Y para el trabajoso rodaje en Babelsberg había construido especialmente el primer estudio de producción virtual de Europa. La vara estaba alta. Al fin y al cabo, “Dark” había resultado una de las series más populares en toda la historia de Netflix. Pero, ¿valió la pena tanto esfuerzo?

Las series que para ser vistas requieren un manual de instrucciones son problemáticas. A no ser que, como en “1899”, el “manual de observación” ya venga con el revuelo publicitario previo. “Una serie verdaderamente europea”, anunciaron Baran bo Odar (dirección) y Jantje Friese (guion) cuando comenzó el rodaje de su thriller de misterio. Y no exageraron. La babilónica mescolanza lingüística a bordo del buque de emigrantes Kerberos resulta una decisión tan inteligente como inquietante por parte del exitoso dúo creador de “Dark”. “En el centro está la pregunta de por qué nos unimos y por qué nos separamos, y de cómo el miedo puede ser el disparador para que ocurra esto último”, dijeron los productores a la revista especializada Variety. Entonces, a quitar el doblaje, activar los subtítulos e izar velas para navegar rumbo al subconsciente.

El cerebro contiene todos los secretos del universo. Dentro de nosotros hay todo un mundo oculto que espera ser descifrado.

“1899”, Maura Franklin (Emily Beecham)

Reminiscencias de Freud

Con su estética sutil y sombría, esta obra en ocho capítulos de Friese y Odar es un terrorífico viaje entre nieblas marinas a los abismos de la mente, con reminiscencias de Sigmund Freud: en “1899” el buque de vapor Kerberos atraca en Southampton, con destino a Nueva York. A bordo pululan personas de las más diversas nacionalidades, estamentos y orígenes. Los une una cosa: todos quieren ir al Nuevo Mundo y dejar atrás el pasado y todos los traumas, dramas familiares y errores, dejarlos atrás lo antes posible. Tal es el caso de la joven médica Maura Franklin (Emily Beecham), que se ha consagrado al estudio del cerebro. “El cerebro contiene todos los secretos del universo. Dentro de nosotros hay todo un mundo oculto que espera ser descifrado”, dice ella. Cabe preguntarse si no sería mejor que algunas cosas siguieran ocultas: todos los pasajeros del Kerberos traen consigo abundante equipaje emocional.

  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix
  • Standbild aus der Netflix Serie 1899 © Netflix

No sorprende, por eso, que reaccionen ásperamente, cuando el capitán Eyk Larsen (Andreas Pietschmann, que también actuó en “Dark”) cambia el curso en alta mar y sigue una señal radiotelegráfica del Prometeo. La nave hermana del Kerberos está perdida desde hace cuatro meses. Larsen y su tripulación encuentran el buque de vapor flotando a la deriva en el Atlántico. Al mismo tiempo que hacen un ominoso descubrimiento en el Prometeo, la compañía naviera mensajes por radio: “Hundan el barco”. Por un tiempo, ese es el único contacto con el mundo exterior ya que se levanta niebla y los aparatos de navegación enloquecen. Cuando, ante esta situación, el capitán Larsen quiere poner el Kerberos de regreso rumbo a Europa, los acontecimientos se precipita. Y ese sólo es el comienzo. Por eso “1899” no es una serie simplemente entretenida para mirar mientras se hace otra cosa, sino una sombría odisea, en sentido literal y figurado, una odisea compleja y ambiciosa. Almas perdidas revolotean cual fuegos fatuos en los estrechos corredores de madera del Kerberos: una pesadilla al estilo de un steam-punk victoriano. Todo envuelto por la banda sonora del compositor australiano-islandés Ben Frost, que ya conocimos en “Dark”, y una estremecedora versión de “White Rabbit”, de Jefferson Airplane.

© Netflix

¿Pantallas verdes? ¡LED!

Se dice que “1899” costó casi 50 millones de euros y así esta serie de misterio es la serie alemana más cara de todos los tiempos. También en el aspecto técnico la producción ha establecido nuevos estándares. Después del éxito mundial de “Dark” (también de Netflix), la autora Jantje Friese y el director Baran bo Odar (“The Silence”) fundaron una productora, Dark Ways, y además, en colaboración con el Studio Babelsberg, el primer estudio LED de Europa. Este espacio de producción virtual se cuenta, según Netflix, entre los más grandes de su tipo en el mundo. La novedad: en las históricas salas del Studio Babelsberg ya no hay más pantallas verdes. Ahora, detrás de los actores se proyectan en instalaciones LED escenarios virtuales, en el caso de “1899”, escenas marítimas.

© Netflix
Estudio de producción virtual Dark Bay en Babelsberg (MP4 / 16.6MB)

La imagen es, como cabía esperar, impactante. Pero esa no es la única razón por la que vale la pena mirar la serie con atención. Un segundo de distracción y "1899" vuelve a ser un misterio. ¿Qué esconde la compañía naviera, cuyo logo aparece en los lugares más raros? ¿Por qué los hombres de a bordo son atormentados por pesadillas y flashbacks? ¿Y qué tan confiables son esos recuerdos? ¿Por qué algunos pasajeros han recibido cartas con el mensaje “Lo que está perdido será encontrado”? ¿Qué significan los mensajes de los triángulos y quién los envía al Kerberos? ¿Qué se oculta en la habitación 1011? ¿Pueden los escarabajos abrir puertas? ¿Hay un asesino entre los pasajeros? ¿Y qué esconde el número 1899? Cada episodio contiene innumerables giros, los destinos se entrelazan y a un enigma le sigue otro. Se podría hablar muchísimo más sobre “1899” y no estaríamos adelantando casi nada. Digamos solo esto: el Kerberos oculta misterios emocionantes y vale la pena leer con atención los subtítulos.

“1899”
Alemania, 2022 / 8 episodios de entre 50 y 62 minutos
Producción: Dark Ways / Productores ejecutivos: Jantje Friese, Baran bo Odar / Distribución: Netflix
Creado por Jantje Friese y Baran bo Odar / Dirección: Baran bo Odar
Escrito por Jantje Friese, Dario Madrona López Gallego, Emma Ko, Jerome Bucchan-Nelson, Juliana Lima Dehne, Emil Nygaard Albertsen.
Elenco: Emily Beecham, Aneurin Barnard, Andreas Pietschmann, Miguel Bernardeau, José Pimentão Isabella Wei, Gabby Wong Yann Gael, Mathilde Ollivier, Jonas Bloquet, Rosalie Craig, Maciej Musiał, Clara Rosager, Lucas Lynggaard Tønnesen, Maria Erwolter, Alexandre Willaume, Tino Mewes, Isaak Dentler, Fflyn Edwards, Anton Lesser...

También le puede interesar

Failed to retrieve recommended articles. Please try again.