Exposición de fotografía en el marco del Festival de la Luz 2016.
Un proyecto del Goethe-Institut Buenos Aires. Con el auspicio de la Embajada de de Alemania en Buenos Aires.
Curadora: Julie August
Inauguración: 04/08 a las 19 h
Visita guiada y charla con la curadora: 13/08, 17 h
UN 242
Utilizando la fotografía como medio de su trabajo artístico, Katharina Gaenssler suele trabajar con cientos y miles de imágenes. Sin embargo, en el caso del proyecto “UN 242”, la artista “solamente” apela a 242 fotografías con un mismo y único motivo. Un mismo y único objeto es protagonista de todas las imágenes. Lo que se ve es la fachada oeste de la Sede de la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York, el imponente edificio construido por los arquitectos Oscar Niemeyer y Le Corbusier alrededor de 1952. Prácticamente en el mismo eje visual –tomando en cuenta el lugar desde donde se realizan las tomas– se encuentra además el edificio Chrysler, que se halla tapado casi por completo por el de Naciones Unidas; del Chrysler apenas sobresale la punta, y la superposición de ambos edificios da por resultado una especie de cubicación parecida a una catedral.
La artista realizó las fotografías durante su estadía de tres meses en el invierno de 2010/2011 en Long Island City, a la altura de la calle 42. Lo hizo desde la ventana de la cocina de su estudio ubicado del otro lado del East River. El lugar de las tomas no siempre es exactamente el mismo y las fotografías fueron hechas en distintas horas del día. Hubo días en los que la artista tomó varias fotografías y otros en los que no tomó ninguna. Como ella misma lo formula, “reaccionaba impulsivamente al color, a los reflejos de la luz y a las condiciones climáticas”. Fotografiaba de manera espontánea y sin trípode.
Durante el tiempo en que se realizaron las tomas, la fachada de vidrio del edificio de las Naciones Unidas se encontraba en proceso de saneamiento y reforma. Así, la fotógrafa documentó el avance de los trabajos de renovación y este proceso se inscribe en la serie como una dimensión temporal.
Por todo lo dicho, las 242 fotografías no son iguales, pese a que su contenido es el mismo. La mirada minuciosa de la artista, su fascinación por las diferencias sutiles y por la magia del motivo ante las más variadas condiciones lumínicas, su interés por la fotografía como medio del trabajo artístico, la reacción de la cámara a la luz comparada con la percepción del ojo humano… Todo esto puede percibirlo el espectador en, por así decirlo, 242 capítulos.
Con todo este material fotográfico Katharina Gaenssler decidió hacer un libro de artista. La elección del formato gigantesco de 68 x 51 cm surgió con la intención de lograr una intensificación de las distintas superficies monocromáticas del cielo y, al mismo tiempo, volver perceptibles ciertos detalles como obreros, gaviotas, aviones o incluso alteraciones en la tela que cubría la obra en construcción. Además, el hecho de pasar las páginas de un libro tan grande exige del espectador un amplio movimiento del brazo que le permite experimentar corporalmente la magnitud del objeto. Esto a su vez se ve reflejado en la arquitectura del motivo.
Como medio artístico, el libro tiene una importancia central en la obra de Katharina Gaenssler. Sus voluminosas instalaciones siempre tienen como soporte el formato libro, y las respectivas formas y diseños son concebidos en estricta relación con el contenido. Las características específicas de un libro, su condición de objeto físico, la superficie del material, lo háptico, el tempo y la dirección narrativa del relato, la intimidad y el manejo sensorial-corporal del observador con el libro son recursos importantes en su obra.
En Buenos Aires, las 242 fotos de la Sede de la Organización de las Naciones Unidas se presentan en forma de proyección en el Museo de Arquitectura (MARQ), en el marco del Festival de la Luz y gracias a la gestión y el apoyo del Goethe-Institut. Dada esta forma de presentación como proyección, la obra pierde su materialidad volviéndose, por así decirlo, “un juego de luces”. Sin embargo, para dar cuenta de aquella materialidad tan importante para Katharina Gaenssler, la proyección de las 242 fotografías será acompañada por un video que permite ver el libro en su tamaño original y a la artista pasando una a una sus páginas. El MARQ, que no solamente presenta exposiciones sobre arquitectos o arquitecturas sino que muchas veces también exhibe trabajos de artistas plásticos relacionados con la arquitectura, es un espacio maravilloso para este estreno sudamericano.
Julie August
Curadora
La artista alemana
Katharina Gaenssler estudió en la Academia de Bellas Artes en Múnich, Alemania, luego de haber finalizado una formación en orfebrería y platería. Ha recibido numerosas becas para realizar proyectos en el extranjero, por ejemplo en Italia, EE.UU. e Israel. Paralelamente a sus instalaciones fotográficas de gran tamaño, que suelen consistir de miles de imágenes, crea edicionesde libros de artista. Katharina Gaenssler ha realizado muestras en numerosos e importantes museosen Alemania (Lenbachhaus München, Kunstmuseum Stuttgart, Folkwangmuseum Essen) y tambiéna nivel internacional, como recientemente en el MoMA de Nueva York.
La curadora alemana
Julie August dirigió un espacio para proyectos en Berlín, siendo la fotografía uno de sus ejes. Entre otras, se presentaron muestras individuales de Beatrice Minda, Julia Kissina, Hannes Wanderer y Katharina Gaenssler. Además trabaja como curadora independiente: organizó numerosas exposiciones en Berlín y dos grandes muestras en Tirana, Albania. Desde 2010 es miembro de la comisión directiva del Museo de la Mujer de Berlín. Desde hace dos años vive principalmente en Buenos Aires, donde también ha curado numerosas muestras.
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