Objetivo de la ONU: Industria e innovación sustentables
¿Qué tan limpia es la producción de Alemania?

Estudiantes de la Universidad de Bochum desarrollaron un coche que funciona con energía solar y viajaron por el mundo con él.
Estudiantes de la Universidad de Bochum desarrollaron un coche que funciona con energía solar y viajaron por el mundo con él. | Foto (detalle): © Hochschule Bochum

¿Cómo pueden volverse sustentables los procesos industriales? ¿Y cómo se puede convertir Alemania en un centro de innovación? Friedbert Pautzke, el primer profesor de electromovilidad de Alemania, nos habla al respecto.

De Benjamin Bergner, 1014

¿Sr. Pautzke, cómo evalúa el estado actual de la industrialización y la innovación sustentables en Alemania y el mundo?

El gran reto en el ámbito de la industrialización y la innovación son los procesos industriales. ¿Cómo los transformamos para volverlos sustentables? ¿Sobre todo los que aún dependen de combustibles fósiles? En vez de tratar de cambiar todo a energía renovable, ahora creo que el enfoque de los procesos industriales sustentables debería ser la eficiencia energética. Por ejemplo, estoy a favor de la electromovilidad porque conduces un automóvil con energía eléctrica a un alto nivel de eficiencia, de entre 60% y 70%. En contraste, un motor de combustión que use combustibles fósiles tan solo alcanza un 20% de eficiencia. Sin embargo, si tanto la potencia como el calor generados por los motores de combustión pueden aprovecharse, entonces, esos motores también se pueden usar de forma eficiente, por ejemplo, en las casas.

En la mayoría de los procesos industriales generamos una enorme cantidad de calor además del producto deseado. Eso nos deja dos vías para la industrialización e innovación sustentables: o le encontramos un uso al calor generado o desarrollamos otros procesos industriales en los que no se genere ni se desperdicie calor.

¿Cómo es la vida diaria en sus proyectos en la Universidad de Ciencias Aplicadas de Bochum y qué metas tiene?

Una de mis metas es darles responsabilidad a mis estudiantes, para que liberen su potencial y su ingenuidad. Mientras que un maestro artesano quizá ya tenga la responsabilidad de una compañía de por lo menos treinta empleados, seguimos tratando a los estudiantes universitarios de 23 años como niños. Nuestro proyecto SolarCar estuvo manejado por los propios estudiantes. Ellos desarrolaron y construyeron el coche, planearon el viaje alrededor del mundo y lo llevaron a cabo con éxito en 2013. Con SolarCar demostramos que la movilidad eléctrica es posible y que los coches pueden funcionar con celdas solares en el techo.

Otro objetivo es la creación de empleos, es decir, ayudar a los estudiantes a fundar empresas con la experiencia que obtuvieron durante nuestros proyectos y ayudarles a desarrollar productos que sobrevivan al mercado. Un ejemplo muy exitoso es Voltavision, que en tan solo ocho años se ha convertido en el centro de pruebas de baterías y electrónica más grande de Europa. Ahora estamos tratando de institucionalizar un camino: primero, identificar alumnxs que tengan una idea y promoverla dentro de la universidad de tal manera que puedan fundar una empresa. En segundo lugar, darles responsabilidades durante sus estudios y brindarles experiencia útil para autoemplearse.

En la Universidad de Ciencias Aplicadas de Bochum hemos estado ofreciendo un programa de maestría en sustentabilidad desde 2013. Preferimos un enfoque integral y holístico de la sustentabilidad, porque es más que protección del medio ambiente; también incluye aspectos económicos y sociales.

En un mundo ideal, ¿que le gustaría que hiciera Alemania para lograr el noveno objetivo de la ONU de “construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación”?

La eficiencia energética en procesos industriales es importante, pero también tenemos que desarrollar mejores ideas para evitar el consumo de energía de entrada. Por ejemplo, centros laborales que le permitan a la gente trabajar cerca de casa, para que haya menos trayectos urbanos. Ahora, durante la crisis del coronavirus, nos damos cuenta de que la gasolina está más barata y el aire, más limpio. Es una verdadera oportunidad para pensar en cómo continuar con esta práctica.
 

La sustentabilidad es más que protección del medio ambiente; también incluye aspectos económicos y sociales.

Friedbert Pautzke

También tenemos que librarnos de las regulaciones y obstáculos que impiden la industrialización e innovación sustentables. Por ejemplo, es muy difícil que una universidad apoye a sus alumnos para fundar una empresa, porque las universidades no tienen permitido apoyar compañías privadas, aunque sean las de sus propios estudiantes.

Otro ejemplo son las compañías que antes trabajaban para la industria automotriz y quieren convertir sus productos a la electromovilidad, o las empresas jóvenes que se mudan a edificios existentes. Eso suele requerir un cambio en el uso de suelo. Un obstáculo a la conversión rápida a la movilidad eléctrica es el proceso de aprobación, que es largo y complejo. Es responsabilidad de los Estados proporcionar el marco normativo adecuado para las prácticas sostenibles.

Piensa en grande y empieza por lo pequeño: una cosa son los incentivos, los subsidios y las leyes, ¡pero la implementación en nuestro ámbito de responsabilidad es igual de importante! El gobierno de una ciudad podría hacer muchas cosas en su propio municipio. Y nosotros como ciudadanos podemos tratar de evitar consumir energía de entrada.

Es ingenuo creer que si permitimos el dominio del libre mercado, podremos transformar nuestras industrias. Siempre habrá alguien en algún lugar del mundo que sea más competitivo por producir bienes más baratos con los métodos antiguos. Voy a poner un ejemplo: vi cómo la energía solar se construyó en Europa en muy poco tiempo y también vi cómo se destruyó por completo esa industria en un tiempo aún menor, porque permitieron que compitiera en condiciones injustas. Ahora estoy viendo lo mismo en la industria acerera: si permitimos que las compañías extranjeras que trabajan en condiciones más sencillas ofrezcan sus productos libremente, entonces nuestra industria, que está pasando por una fase de conversión hacia las energías renovables, no tiene oportunidad de sobrevivir.

Desde una perspectiva global, no es sustentable sacar a las industrias sucias de Alemania si seguimos comprando productos sucios del extranjero. Si necesitamos productos, tenemos que responsabilizarnos por cómo se producen. No podemos declarar que Alemania es un país limpio si los productos que consumimos se producen de manera sucia en el extranjero y luego los importamos. La industrialización e innovación sustentables requieren un enfoque integral.

Esta entrevista fue producida y publicada por primera vez en 1014, en Nueva York.
 

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