Cine alemán Yo y Kaminski (Ich und Kaminski)

Daniel Brühl & Jesper Christensen © X-Verleih / GORDON Photography

Mié, 06.03.2019

19:30

Goethe-Institut Perú

Director artístico: Wolfgang Becker, color, 120 min., 2013-15

Alemania en los años noventa: el crítico de arte Sebastian Zöllner persigue el gran éxito. Quiere escribir un libro de revelaciones sobre Manuel Kaminski. El pintor, antaño prominente y ahora casi olvidado, discípulo de Matisse y amigo de Picasso, se ha retirado a vivir en un chalet en Graubünden y al parecer está ciego desde hace tiempo. Zöllner lo localiza y sin escrúpulo alguno penetra en su vida, se adueña de algunas de sus últimas pinturas y lo induce a viajar a Bélgica. Según se cree allá vive Teresa, el amor juvenil de Kaminski quien la cree muerta. Ya en camino, Zöllner empieza a presentir que el anciano podría ser mucho más listo que él.

El método de exposición recuerda ZELIG de Woody Allen, las escenas introducidas clandestinamente en el material documental de archivo. El mundo del arte supuestamente llora la muerte del pintor Manuel Kaminski, el último representante de la modernidad clásica, discípulo de Matisse, amigo de Picasso. Claes Oldenburg o Andy Warhol, Woody Allen y Jack Lemmon se convierten en presuntos testigos de la vida y obra de Kaminski, la que incluso habría influido a Hitchcock y los Beatles.
 
Sebastian Zöllner quisiera iniciar finalmente su carrera como crítico de arte, y proyecta un libro de revelaciones sobre Kaminski, sabiendo que el legendario pintor, al parecer famoso debido únicamente a un malentendido, un mito de la modernidad clásica, se ha retirado a vivir en un chalet suizo. Ya durante el viaje en tren a Suiza se vislumbra la agresiva arrogancia de Zöllner. Encuentra la casa del pintor situada en las montañas, entra con descaro e impertinencia, se pavonea ante Miriam, la hija de Kaminski, se atreve a meterse de intruso entre los invitados a una velada musical y se invita él mismo al banquete – hasta que se lo exhorta sin miramientos a marcharse. De regreso en el hostal, se entera por teléfono de que su novia Elke, lo ha echado de su casa. Una pareja de compositores le cuenta que Kaminski tuvo antaño un gran amor, Theresa, la musa que contribuyó a “salvar el contenido” de su trabajo. Que el artista nunca pudo superar la separación y que para aliviar su dolor se valieron de una mentira – la muerte de su amante. Zöllner descubre que entretanto la mujer vive en Bélgica. El periodista irrumpe nuevamente en la casa del pintor y encuentra algunos cuadros sin firma – depresivos autoretratos de Kaminski – hurta dos de ellos y persuade al pintor de viajar con él a Bélgica para visitar a Theresa. Y ahora empieza una curiosa road movie; al parecer ambos hombres se acechan y se mienten constantemente. Alguien roba el lujoso auto de Kaminski con los cuadros hurtados; el pintor llama a una prostituta a la habitación del hotel, causando bastantes disgustos.
 
Zöllner se hospeda con Kaminski en el departamento de Elke y lo lleva a la inauguración de una exposición. Los invitados fingen reconocer a Kaminski, pero él ha escuchado muy bien: “¡Nadie conocía ninguno de mis cuadros!” Zöllner se preocupa por el pintor al verlo evidentemente agotado: “¡No quiero que se muera!” Eso pondría en peligro su proyecto del libro. Kaminski, el presunto ciego, dibuja un boceto con la cara vuelta hacia un lado, luego conduce la mano de Zöllner con el lápiz. El resultado es un retrato del autor de sorprendente intensidad.
 
Ambos hombres viajan en el auto de Elke a ver a Theresa que vive con un adorable belga. Al llegar, Kaminski declara: “¡El arte no me importa nada!”. ¿Es de creer? ¿O es un capricho del momento? El reencuentro con el gran amor lo lleva a una profunda decepción. Ella ni siquiera recuerda el nombre de Kaminski y al parecer sufre de demencia. Ambos visitantes abandonan desilusionados la casa y se escapan de Miriam que aparece repentinamente. Al final, ambos están sentados en una playa. Kaminski ha declarado que desde hace tiempo alguien está escribiendo un libro sobre él. Zöllner arroja su manuscrito al mar, pero conserva su teléfono celular que contiene las fotos. El pintor le regala uno de los cuadros hurtados y lo firma para Zöllner. Kaminski está sentado en la playa, lentamente el enfoque se convierte en una pintura. El final adecuado para un relato cuyos protagonistas se desplazan por el film de manera desconcertante sin una verdadera historia propia.
 
YO Y KAMINSKI, al igual que la novela que sirve de base a la película, es un proyecto arriesgado por la falta de un protagonista positivo. Zöllner, lo mismo que Kaminski, con toda su presunción y sus permanentes mentiras son difíciles de tolerar – y sin embargo, el director y ambos actores consiguen algo literalmente imposible: el espectador participa en su trayecto y al final, pese a toda su resistencia, siente una cierta simpatía hacia ellos. Desde luego que el film no debiera interpretarse como mera sátira al mercado del arte. “YO Y KAMINSKI es una película sobre la ceguera en diversos sentidos, sobre la ambición y el arte, sobre la mentira, la verdad y los medios y sobre el eterno duelo entre la vejez y la juventud.” (Daniel Kehlmann). La clave podría ser la historia de Bodhidharma contada por Kaminski: Un discípulo se había unido al sabio monje, siguiéndolo a lo largo de muchos años, hasta que un día le expresó: “¡Maestro! ¡No poseo nada! A lo que el maestro replicó: “¡Tíralo!”. Esto corresponde precisamente al punto culminante. También cuando Zöllner pregunta: “Si no poseo nada, ¿pues qué debería tirar?”. Al final, al menos lo percibirá.
 
 
Biografía
 
Wolfgang Becker nació en Hemer (Westfalia) en 1954. Estudió en la Universidad Libre de Berlín y a partir de 1981 en la Academia Alemana de Cine y Televisión de Berlín (DFFB). Con MARIPOSAS, su película de graduación (1988, adaptación de un relato de Ian McEwan) ganó el “Oscar estudiantil”. En 1994 formó parte de los miembros fundadores de X Film Creative Pool. En 2002, GOODBYE, LENIN fue nominada para el Golden Globe como la película alemana más exitosa del año. Becker ocupó la cátedra de dirección artística en la Academia de Arte y Medios de Colonia, fue docente en la DFFB, así como en la Academia de Cine de Baden-Wurtemberg. Wolfgang Becker
 
Filmografía (selección)
 
1988      MARIPOSAS
1991      BLUTWURSTWALZER (EL VALS DE LA MORCILLA)
1992      JUEGOS DE NIÑOS
1997      LA VIDA EN OBRAS
2003      GOOD BYE, LENIN
2005      BALLERO (Kurzfilm)
2009      DEUTSCHLAND '09 - Episode: KRANKES HAUS (ALEMANIA 2009 – EPISODIO: CASA ENFERMA)
2015      YO Y KAMINSKI
 
H.G. Pflaum, 24.02.2017

 

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