Uwe Timm
Uwe Timm nace en 1940 en Hamburgo.
De niño ya escuchaba con atención los relatos de los marineros y las noticias de los soldados que regresaban de la guerra. Pero sobre todo sabe narrar sus propias historias y lo demuestra desde hace más de treinta años con cada una de sus maravillosas novelas. Además es autor de guiones cinematográficos y radiofónicos, y de literatura infantil.
Timm ha sido distinguido con numerosos premios, entre ellos el premio literario de Múnich, el Gran premio de literatura de la academia de bellas artes de Baviera y la Medalla Carl Zuckmayer.
Muchas de sus obras han sido traducidas al castellano.
De niño ya escuchaba con atención los relatos de los marineros y las noticias de los soldados que regresaban de la guerra. Pero sobre todo sabe narrar sus propias historias y lo demuestra desde hace más de treinta años con cada una de sus maravillosas novelas. Además es autor de guiones cinematográficos y radiofónicos, y de literatura infantil.
Timm ha sido distinguido con numerosos premios, entre ellos el premio literario de Múnich, el Gran premio de literatura de la academia de bellas artes de Baviera y la Medalla Carl Zuckmayer.
Muchas de sus obras han sido traducidas al castellano.
Uwe Timm nace en 1940 en Hamburgo. Aprende el oficio de peletero y en 1963 aprueba el bachillerato. Después estudia Germánicas y Filosofía en Múnich y París. En 1971 se doctora en Filosofía con la tesis “El problema del absurdo en la obra de Camus”. Actualmente Uwe Timm vive entre Múnich y Berlín.
A Uwe Timm le encantan las historias. De niño ya escuchaba con atención los relatos de los marineros y las noticias de los soldados que regresaban de la guerra. Pero sobre todo sabe narrar sus propias historias y lo demuestra desde hace más de treinta años con cada una de sus maravillosas novelas. Además es autor de guiones cinematográficos y radiofónicos, y de literatura infantil.
Uwe Timm se da a conocer en 1971 como poeta lírico, influido por las ideas del movimiento estudiantil del mayo del 68. Ese período acompaña siempre al autor, las novelas Heißer Sommer (1974), Kerbels Flucht (1980) y Rot (2001) dan prueba de la reflexión histórica sobre ese momento. En la narración Der Freund und der Fremde (2005) reelabora su amistad con Benno Ohnesorg, asesinado en 1967 por un policia en una manifestación en contra de la visita del sah de Persia. Las cuestiones políticas y sociales siempre desempeñan un papel importante en sus novelas. En Der Schlangenbaum (1986) trata el tema de la participación de empresas alemanas en Sudamérica; en Morenga (1978), el pasado poscolonial de Alemania, y en Kopfjäger (1991), el fraude económico en nuestra sociedad. Con Am Beispiel meines Bruders (Tras la sombra de mi hermano), de 2003, el autor intenta aclarar los motivos que llevaron a su hermano mayor a ingresar en las SS. Con este libro Uwe Timm abre un nuevo debate sobre la memoria histórica alemana. Además de sus novelas, que no tienden a ser moralizadoras, sino más bien informan de manera entretenida, escribe también historias “por el placer de transformar el mundo como si fuera un juego, para hacer surgir algo nuevo, algo que aún no existía”.
Su novela Vogelweide (2013) trata del amor entre dos personas que en su relación son felices las dos y sin embargo sienten nostalgia por otra vida.
Uwe Timm ha sido distinguido con numerosos premios, entre ellos el premio literario de Múnich (1989), el gran premio de literatura de la academia de bellas artes de Baviera (2001) y la Medalla Carl Zuckmayer (2012).
Copyright: Goethe-Institut Barcelona
Texto: Ilka Haederle/ Traducción: Rosina Nogales Tudela
A Uwe Timm le encantan las historias. De niño ya escuchaba con atención los relatos de los marineros y las noticias de los soldados que regresaban de la guerra. Pero sobre todo sabe narrar sus propias historias y lo demuestra desde hace más de treinta años con cada una de sus maravillosas novelas. Además es autor de guiones cinematográficos y radiofónicos, y de literatura infantil.
Uwe Timm se da a conocer en 1971 como poeta lírico, influido por las ideas del movimiento estudiantil del mayo del 68. Ese período acompaña siempre al autor, las novelas Heißer Sommer (1974), Kerbels Flucht (1980) y Rot (2001) dan prueba de la reflexión histórica sobre ese momento. En la narración Der Freund und der Fremde (2005) reelabora su amistad con Benno Ohnesorg, asesinado en 1967 por un policia en una manifestación en contra de la visita del sah de Persia. Las cuestiones políticas y sociales siempre desempeñan un papel importante en sus novelas. En Der Schlangenbaum (1986) trata el tema de la participación de empresas alemanas en Sudamérica; en Morenga (1978), el pasado poscolonial de Alemania, y en Kopfjäger (1991), el fraude económico en nuestra sociedad. Con Am Beispiel meines Bruders (Tras la sombra de mi hermano), de 2003, el autor intenta aclarar los motivos que llevaron a su hermano mayor a ingresar en las SS. Con este libro Uwe Timm abre un nuevo debate sobre la memoria histórica alemana. Además de sus novelas, que no tienden a ser moralizadoras, sino más bien informan de manera entretenida, escribe también historias “por el placer de transformar el mundo como si fuera un juego, para hacer surgir algo nuevo, algo que aún no existía”.
Su novela Vogelweide (2013) trata del amor entre dos personas que en su relación son felices las dos y sin embargo sienten nostalgia por otra vida.
Uwe Timm ha sido distinguido con numerosos premios, entre ellos el premio literario de Múnich (1989), el gran premio de literatura de la academia de bellas artes de Baviera (2001) y la Medalla Carl Zuckmayer (2012).
Copyright: Goethe-Institut Barcelona
Texto: Ilka Haederle/ Traducción: Rosina Nogales Tudela
TRADUCIDO AL CASTELLANO
Tras la sombra de mi hermano
Trad. de Carles Andreu Saburit
Destino, Madrid 2007
El hombre del velocípedo
Trad. de Eduardo Knörr Argote
Amaranto Editores, Madrid 2006
El árbol de la serpiente
Trad. de José Aníbal Campos González
Editorial Arte y Literatura, La Habana 2004
La invención de la salchicha al curry
Trad. de José Pinués
Ed. Akal, Madrid 2003
La noche de San Juan
Trad. de Cristina García Ohlring
Alfaguara, Madrid 2001
El tesoro de Pagensand
Trad. de Carlos Fortea Gil
Anaya, Madrid 1999
El ratón del tren
Trad. de Mon Elsa Alfonso
Alfaguara, Madrid 1986
EN LENGUA ALEMANA
Novelas
Vogelweide
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2013
Freitisch
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2011
Halbschatten
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2008
Der Freund und der Fremde
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2005
Am Beispiel meines Bruders
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2003
Rot
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2001
Johannisnacht
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1996
Kopfjäger
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1991
Der Schlangenbaum
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1989
Kerbels Flucht
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1980
Morenga
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1978
Heißer Sommer
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1974
Ensayos
Am Beispiel eines Lebens
Eine Sonderausgabe autobiographischer Schriften zum
70. Geburtstag von Uwe Timm
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2010
Von Anfang und Ende. Über die Lesbarkeit der Welt
Frankfurter Poetikvorlesungen
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2009
Gesammelte Schriften
Veröffentlichungen von 1955 bis 2002
Espero, Neu Wulmstorf 2002
Was ist eigentlich Faschismus?
Edition Anares, 1997
Erzählen und kein Ende
Versuch zu einer Ästhetik des Alltags
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1993
Narraciones
Verlorene Kindheit – Errungene Freiheit.
Biografie eines unbequemen Literaten
Oppo-Verlag, Berlin 2007
Nicht morgen, nicht gestern
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1999
Die Entdeckung der Currywurst
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1993
Vogel, friß die Feige nicht: Römische Aufzeichnungen
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1989
Der Mann auf dem Hochrad
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1984
Obras de teatro
Eine Handvoll Gras
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2000
Literatura juvenil
Der Schatz auf Pagensand
Eine wahrhaft abenteuerliche Geschichte
Nagel & Kimche, Zürich/Frauenfeld 1995
Rennschwein Rudi Rüssel
Nagel & Kimche, Zürich/Frauenfeld 1989
Die Pirateninsel
Benziger, Zürich 1983
Tras la sombra de mi hermano
Trad. de Carles Andreu Saburit
Destino, Madrid 2007
El hombre del velocípedo
Trad. de Eduardo Knörr Argote
Amaranto Editores, Madrid 2006
El árbol de la serpiente
Trad. de José Aníbal Campos González
Editorial Arte y Literatura, La Habana 2004
La invención de la salchicha al curry
Trad. de José Pinués
Ed. Akal, Madrid 2003
La noche de San Juan
Trad. de Cristina García Ohlring
Alfaguara, Madrid 2001
El tesoro de Pagensand
Trad. de Carlos Fortea Gil
Anaya, Madrid 1999
El ratón del tren
Trad. de Mon Elsa Alfonso
Alfaguara, Madrid 1986
EN LENGUA ALEMANA
Novelas
Vogelweide
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2013
Freitisch
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2011
Halbschatten
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2008
Der Freund und der Fremde
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2005
Am Beispiel meines Bruders
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2003
Rot
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2001
Johannisnacht
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1996
Kopfjäger
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1991
Der Schlangenbaum
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1989
Kerbels Flucht
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1980
Morenga
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1978
Heißer Sommer
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1974
Ensayos
Am Beispiel eines Lebens
Eine Sonderausgabe autobiographischer Schriften zum
70. Geburtstag von Uwe Timm
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2010
Von Anfang und Ende. Über die Lesbarkeit der Welt
Frankfurter Poetikvorlesungen
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2009
Gesammelte Schriften
Veröffentlichungen von 1955 bis 2002
Espero, Neu Wulmstorf 2002
Was ist eigentlich Faschismus?
Edition Anares, 1997
Erzählen und kein Ende
Versuch zu einer Ästhetik des Alltags
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1993
Narraciones
Verlorene Kindheit – Errungene Freiheit.
Biografie eines unbequemen Literaten
Oppo-Verlag, Berlin 2007
Nicht morgen, nicht gestern
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1999
Die Entdeckung der Currywurst
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1993
Vogel, friß die Feige nicht: Römische Aufzeichnungen
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1989
Der Mann auf dem Hochrad
Kiepenheuer & Witsch, Köln 1984
Obras de teatro
Eine Handvoll Gras
Kiepenheuer & Witsch, Köln 2000
Literatura juvenil
Der Schatz auf Pagensand
Eine wahrhaft abenteuerliche Geschichte
Nagel & Kimche, Zürich/Frauenfeld 1995
Rennschwein Rudi Rüssel
Nagel & Kimche, Zürich/Frauenfeld 1989
Die Pirateninsel
Benziger, Zürich 1983
Nacido el 30 de marzo de 1940 en Hamburgo
Formación como peletero en Hamburgo | |
1961 - 1963 | Asistencia a una escuela de adultos; bachillerato |
desde 1963 | Estudios de Filología Germánica en Múnich y en París |
1967 - 1968 | Miembro de la Unión Alemana Socialista |
de Estudiantes (SDS) | |
1971 | Doctorado en Filosofía |
1972 - 1982 | Coeditor del proyecto editorial Autoren-Edition |
1979 | Premio Literario de la Ciudad de Bremen |
1981 - 1983 | Estancia en Roma |
1989 | Premio promocional de Literatura de Múnich |
1990 | Premio Alemán de Literatura Juvenil |
1996 | Premio bávaro de película infantil para |
Rennschwein Rudi Rüssel | |
2001 | Premio Tukan; Gran Premio Literario |
de la Academia Bávara de Bellas Artes | |
2002 | Premio de Literatura de la ciudad de Múnich |
2003 | Premio de Literatura Schubart |
Premio Erik Reger | |
2006 | Premio de Literatura Jakob Wassermann |
2009 | Premio Heinrich Böll |
Profesor invitado Heinrich Heine | |
2012 | Medalla Carl Zuckmayer |
2013 | Premio de honor de Cultura de Múnich |
Reside en Múnich y Berlín |
La cama de campaña de Napoleón (de: La noche de San Juan)
Esta historia empezó en realidad porque no era capaz de encontrar un comienzo. Me pasaba horas delante de mi escritorio rompiéndome la cabeza, caminaba por la ciudad, volví a fumar, puros, confiando en que, envuelto en su humo, se me ocurriría la frase exacta, precisa y necesaria para iniciar mi relato. Pero no me valió de nada, no conseguía escribir, esa primera y decisiva frase no quería aparecer. Por la noche me quedaba junto a la ventana observando a una mujer que se había mudado hacía poco a la casa de enfrente y que recibía visitas de hombres en su piso bien iluminado. También traté de escribir sobre eso: Un hombre que observa a una mujer de quien supone sabe que la observa. Pero tras un par de páginas interrumpí el trabajo. Me fui a un balneario del mar del Norte y recorrí la playa bajo una primaveral tormenta, aturdido por el ruido de las olas, los gritos de las gaviotas y las quejas del propietario del hotel, cuyo único huésped era mi persona. A los cuatro días volví a refugiarme en mi escritorio. Me había comprado un programa de ajedrez y repetía las partidas del último torneo internacional de Kasparov en mi agenda electrónica. En la tarde del cuarto día -no había pasado de los movimientos de apertura de la primera partida- sonó el teléfono. El redactor de una revista me preguntó si tenía ganas de escribir algo sobre las patatas: sobre cierta "conexión Perú-Prusia". Las patatas y la mentalidad alemana. Y, naturalmente, mis gustos personales al respecto. Recetas, la situación actual de la patata frita. Se rió. A usted le interesan las historias cotidianas, ¿no es así? Once o doce folios, y divague lo que quiera.
Le dije que en ese momento debía concentrarme en otro trabajo y que no tenía tiempo. De hecho, aún seguía tratando de desentrañar una variante ajedrecística con el extraño nombre de el árbol. Después de colgar traté de concentrarme de nuevo en las partidas pero de pronto me acordé de un tío mío. Y es que mi tío Heinz sabía distinguir las variedades de patatas, incluso guisadas o fritas. En el lecho de muerte, y tras varios días en silencio, dijo algo extraño: árbol rojo. Nadie sabía lo que había querido decir con eso. Mi madre supuso que se trataba de una clase de patata. En la familia, o al menos para mi padre, se le consideraba un vago, un gorrón y un fracasado que se había pasado la vida fumando en un canapé. Y ése es también el recuerdo más claro que guardo de él: el tío Heinz en la cocina, tumbado en un sofá, la cabeza recostada en un cojín sobre el reposabrazos. Fumando. Podía hacer unas volutas fenomenales. Cuando yo se lo pedía, exhalaba una cadena de tres aros. Un domingo, poco después de terminar la guerra lo invitamos a él y a la tía Hilde. Mi padre le había sonsacado unas patatas al campesino.
Habíamos puesto la mesa con las últimas piezas de plata que nos quedaban, las que aún no le habíamos cambiado al campesino por comida. Estábamos todos sentados, esperando. Olía a cebolla frita, incluso a tocino, pues mi madre había untado la sartén con una corteza de tocino. Era una comida especial, estaban incluso la señora Scholle y la señora Söhrensen, en cuya casa estábamos alojados. El tío Heinz fue el primero en recibir una, no, dos patatas. Las mascó con cuidado, degustándolas, como degusta el vino un conocedor, con ese movimiento lento de la boca ligeramente entreabierta que es como una escucha dirigida hacia adentro. Titubeó, meneé la cabeza, pensativo, meditabundo, y le pusieron otras dos rebanadas en el plato. Repitió los delicados movimientos de mandíbula. Mi padre preguntó, impaciente: ¿Qué?
De: La noche de San Juan, , p. 9-16
Trad. de Cristina García Ohlrich
© Alfaguara, Madrid 2001
Esta historia empezó en realidad porque no era capaz de encontrar un comienzo. Me pasaba horas delante de mi escritorio rompiéndome la cabeza, caminaba por la ciudad, volví a fumar, puros, confiando en que, envuelto en su humo, se me ocurriría la frase exacta, precisa y necesaria para iniciar mi relato. Pero no me valió de nada, no conseguía escribir, esa primera y decisiva frase no quería aparecer. Por la noche me quedaba junto a la ventana observando a una mujer que se había mudado hacía poco a la casa de enfrente y que recibía visitas de hombres en su piso bien iluminado. También traté de escribir sobre eso: Un hombre que observa a una mujer de quien supone sabe que la observa. Pero tras un par de páginas interrumpí el trabajo. Me fui a un balneario del mar del Norte y recorrí la playa bajo una primaveral tormenta, aturdido por el ruido de las olas, los gritos de las gaviotas y las quejas del propietario del hotel, cuyo único huésped era mi persona. A los cuatro días volví a refugiarme en mi escritorio. Me había comprado un programa de ajedrez y repetía las partidas del último torneo internacional de Kasparov en mi agenda electrónica. En la tarde del cuarto día -no había pasado de los movimientos de apertura de la primera partida- sonó el teléfono. El redactor de una revista me preguntó si tenía ganas de escribir algo sobre las patatas: sobre cierta "conexión Perú-Prusia". Las patatas y la mentalidad alemana. Y, naturalmente, mis gustos personales al respecto. Recetas, la situación actual de la patata frita. Se rió. A usted le interesan las historias cotidianas, ¿no es así? Once o doce folios, y divague lo que quiera.
Le dije que en ese momento debía concentrarme en otro trabajo y que no tenía tiempo. De hecho, aún seguía tratando de desentrañar una variante ajedrecística con el extraño nombre de el árbol. Después de colgar traté de concentrarme de nuevo en las partidas pero de pronto me acordé de un tío mío. Y es que mi tío Heinz sabía distinguir las variedades de patatas, incluso guisadas o fritas. En el lecho de muerte, y tras varios días en silencio, dijo algo extraño: árbol rojo. Nadie sabía lo que había querido decir con eso. Mi madre supuso que se trataba de una clase de patata. En la familia, o al menos para mi padre, se le consideraba un vago, un gorrón y un fracasado que se había pasado la vida fumando en un canapé. Y ése es también el recuerdo más claro que guardo de él: el tío Heinz en la cocina, tumbado en un sofá, la cabeza recostada en un cojín sobre el reposabrazos. Fumando. Podía hacer unas volutas fenomenales. Cuando yo se lo pedía, exhalaba una cadena de tres aros. Un domingo, poco después de terminar la guerra lo invitamos a él y a la tía Hilde. Mi padre le había sonsacado unas patatas al campesino.
Habíamos puesto la mesa con las últimas piezas de plata que nos quedaban, las que aún no le habíamos cambiado al campesino por comida. Estábamos todos sentados, esperando. Olía a cebolla frita, incluso a tocino, pues mi madre había untado la sartén con una corteza de tocino. Era una comida especial, estaban incluso la señora Scholle y la señora Söhrensen, en cuya casa estábamos alojados. El tío Heinz fue el primero en recibir una, no, dos patatas. Las mascó con cuidado, degustándolas, como degusta el vino un conocedor, con ese movimiento lento de la boca ligeramente entreabierta que es como una escucha dirigida hacia adentro. Titubeó, meneé la cabeza, pensativo, meditabundo, y le pusieron otras dos rebanadas en el plato. Repitió los delicados movimientos de mandíbula. Mi padre preguntó, impaciente: ¿Qué?
De: La noche de San Juan, , p. 9-16
Trad. de Cristina García Ohlrich
© Alfaguara, Madrid 2001
Am Beispiel meines Bruders
El más delicado todavía de todos los temas alemanes –la pregunta sobre la implicación de la propia familia en el nacionalsocialismo– rara vez ha sido tratado tan personalmente y tan discretamente; tan lacónicamente como emotivamente al mismo tiempo. La renuncia del narrador a cualquier tipo de relato panfletario o sensacionalista impone tanto como su valor para perfilar lo silenciado y sacarlo a la luz, de una manera que no acusa ni tampoco embellece. Am Beispiel meines Bruders es un buen ejemplo de cómo enfrentarse al pasado sin caer en el cliché y de cómo puede convertirse en obra de arte literaria.
Ann-Britt Gerecke, Litrix 2004
Tras la sombra de mi hermano
Con un sólido conocimiento histórico, calibra sagazmente datos objetivos y observaciones personales para llegar a conclusiones terminantes: “No sólo fue una generación ofendida, sino que estaba enferma y había ignorado su trauma con una reconstrucción ruidosa. Los hechos desaparecieron en estereotipos: Hitler el criminal. El lenguaje no sólo fue públicamente maltratado por los verdugos, sino también por los que decían de sí mismos nos salvamos por poco. Así se granjearon subrepticiamente su papel de víctimas”.
Cecilia Dreymüller, El País 2007
Rot
Uwe Timm despliega un panorama de la más reciente historia alemana en una novela narrada de modo tradicional, con gran dominio. Habla de los errores y esperanzas del 68, tanto de la penosa jerga del movimiento como de alegres locuras juveniles que conducen a las puertas de la fábrica. [...] Los fantasmas de la época revolucionaria persiguen en persona al protagonista. Por este motivo, aquí nos encontramos con un narrador muerto. Se supone que en el momento de morir pasamos revista a nuestra vida, y el protagonista de Uwe Timm viaja de este modo a través de medio siglo.
Manuela Reichart, Süddeutsche Zeitung 2001
Noche de San Juan
Realmente un golpe de suerte, esta Noche de San Juan, con sus reflexiones despreocupadas e inteligentes sobre la naturaleza de los alemanes, una novela que tiene tanta gracia y chispa erótica que tan pocas veces se encuentra en los escritores alemanes.
Thomas Linden, Kölnische Rundschau 1996
El más delicado todavía de todos los temas alemanes –la pregunta sobre la implicación de la propia familia en el nacionalsocialismo– rara vez ha sido tratado tan personalmente y tan discretamente; tan lacónicamente como emotivamente al mismo tiempo. La renuncia del narrador a cualquier tipo de relato panfletario o sensacionalista impone tanto como su valor para perfilar lo silenciado y sacarlo a la luz, de una manera que no acusa ni tampoco embellece. Am Beispiel meines Bruders es un buen ejemplo de cómo enfrentarse al pasado sin caer en el cliché y de cómo puede convertirse en obra de arte literaria.
Ann-Britt Gerecke, Litrix 2004
Tras la sombra de mi hermano
Con un sólido conocimiento histórico, calibra sagazmente datos objetivos y observaciones personales para llegar a conclusiones terminantes: “No sólo fue una generación ofendida, sino que estaba enferma y había ignorado su trauma con una reconstrucción ruidosa. Los hechos desaparecieron en estereotipos: Hitler el criminal. El lenguaje no sólo fue públicamente maltratado por los verdugos, sino también por los que decían de sí mismos nos salvamos por poco. Así se granjearon subrepticiamente su papel de víctimas”.
Cecilia Dreymüller, El País 2007
Rot
Uwe Timm despliega un panorama de la más reciente historia alemana en una novela narrada de modo tradicional, con gran dominio. Habla de los errores y esperanzas del 68, tanto de la penosa jerga del movimiento como de alegres locuras juveniles que conducen a las puertas de la fábrica. [...] Los fantasmas de la época revolucionaria persiguen en persona al protagonista. Por este motivo, aquí nos encontramos con un narrador muerto. Se supone que en el momento de morir pasamos revista a nuestra vida, y el protagonista de Uwe Timm viaja de este modo a través de medio siglo.
Manuela Reichart, Süddeutsche Zeitung 2001
Noche de San Juan
Realmente un golpe de suerte, esta Noche de San Juan, con sus reflexiones despreocupadas e inteligentes sobre la naturaleza de los alemanes, una novela que tiene tanta gracia y chispa erótica que tan pocas veces se encuentra en los escritores alemanes.
Thomas Linden, Kölnische Rundschau 1996