Toda mujer que tenga un empleo fijo tiene derecho a no ir a trabajar durante el tiempo de protección de la maternidad. Normalmente empieza 6 semanas antes del nacimiento. Pero, por ejemplo, si usted trabaja con sustancias químicas en un laboratorio, no puede seguir trabajando ahí estando embarazada, debe ausentarse en seguida del trabajo y solicitar protección de la maternidad.