Sin embargo, muchos medicamentos sólo se pueden comprar con una receta, en la que está escrito qué medicamentos se necesitan. La receta la debe emitir un/a médico/a. Con esa receta puede comprar los medicamentos en una farmacia. Usted paga sólo una parte, el resto lo paga el seguro de gastos médicos.

Por lo general, las farmacias abren de lunes a viernes, de 8 a 18:30 hrs. En las ciudades, algunas están abiertas hasta las 20 hrs. También existe un servicio de emergencia para los sábados, domingos y las noches.

En Alemania es obligatorio que todos/as tengan un seguro de gastos médicos. Lea más al respecto en nuestro texto informativo “Seguros”.

¿Está enfermo/a o necesita ayuda médica? Entonces debe hacer una cita con una/a médico/a general, que responderá las primeras preguntas respecto a todos los malestares y enfermedades. También se les dice médico/a familiar (“Hausarzt” o “Hausärztin”). Él/ella le ayudará a recuperar su salud. Y si no puede ayudar, lo/a enviará con un/a médico/a especialista.

¿Su hijo/a está enfermo/a? Debe llevarlo con un/a pediatra. Normalmente sólo se puede hacer una cita médica de lunes a viernes. Durante el sábado, domingo y por las noches deberá asistir a un servicio de guardia.

Para hacer una cita puede llamar por teléfono al consultorio o hacer la cita en línea. Casi todos/as los/as médicos/as generales ofrecen este servicio, que es útil y práctico: usted debe ir a la página web del consultorio y elegir una fecha y hora para la cita. Recibirá una confirmación en la que viene el nombre del/a médico/a general. Es común recibir un recordatorio poco antes de la cita por correo electrónico o por mensaje de texto al teléfono móvil.

En una cita médica usted necesita la tarjeta de su seguro de gastos médicos, la tarjeta de asegurado/a (“Krankenversichertenkarte”) o la tarjeta de salud (“Gesundheitskarte”). En la primera cita tiene que llenar un formulario con sus datos personales: nombre, dirección, etc. A veces, en el consultorio también le preguntarán qué enfermedades tienen y si toma medicamentos de manera regular.

Una vez que usted avisó de su llegada en la recepción del consultorio, tiene que esperar en la sala de espera hasta que le llamen. Eso puede tardar algunos minutos, aunque a veces también más de una hora.

Ya en el consultorio, el/a médico/a general le preguntará: ¿Qué le duele? ¿Desde cuánto? ¿Ya ha sentido antes esos dolores? Usted deberá describir sus molestias con gran precisión, para que el/a médico/a general puede hacer un diagnóstico y decirle qué enfermedad padece. Con frecuencia, le dará una receta para medicamentos, que uste puede comprar en la farmacia. A veces le dará también otra cita para una nueva revisión.

Usted no tiene que pagar la consulta médica si tiene un seguro de gastos médicos legal (estatal). Los servicios complementarios particulares sí los tendrá que pagar usted. Las personas con un seguro de gastos médicos particular deberán pagar la consulta, que después le reembolsará su seguro de gastos médicos.

¿Está enfermo/a y no puede trabajar? Debe informar de inmediato a su empleador y presentar una solicitud de baja por enfermedad. Debe llamar a la oficina y decir cuánto tiempo es posible que esté enfermo.

¿Asistió a una consulta médica? Si no puede trabajar debido a una enfermedad, el/a médico emitirá un certificado médico que confirme que usted no puede trabajar, y que se debe quedar en casa para reponerse. También especifica cuánto tiempo debe quedarse en casa. No es un documento escrito, el/a médico/a general envía la información directamente al seguro de gastos médicos. El empleador puede consultarlo en línea.

Algunos empleadores quieren tener el certificado médico desde el primer día de enfermedad. Otros, el tercer día. Para que le concedan una baja laboral, también puede hablar por teléfono al consultorio. En caso de enfermedades leves la baja es de hasta cinco días. Si usted sigue enfermo/a, deberá ir a consultar personalmente al/la médico/a general.

Hay muchos diferentes médicos/as que trabajan en diferentes áreas, se les conoce como especialistas. Hay, por ejemplo, ortopedistas, que se ocupan de todo lo que tiene que ver con los huesos y las articulaciones, por ejemplo, si se ha roto un brazo. Los/as ginecólogos/as son médicos que atienden a las mujeres, hacen prevención y atienden a las embarazadas. Hay también otorrinolaringólogos/as y otros muchos/as especialistas.

A menudo, el/la médico/a general le remitirá con un/a especialista. Para ello le dará una orden médica. El/la especialista informará después a su médico/a general qué enfermedad padece usted.

¿Sabe usted qué médico/a especialista necesita? Entonces puede ir a verlo/a directamente, no necesita una orden médica. Tampoco la necesita para ir a ver al dentista.

¿No se siente usted bien? ¿Se siente cansado/a, agotado/a? La salud física es muy importante, pero no sólo el cuerpo puede enfermarse, también la psique. Es decir, todo lo que tiene que ver con los pensamientos y las emociones. Los problemas, crisis, estrés, miedo o violencia pueden enfermarnos. Cuide su salud mental, cuídese a usted mismo/a. Busque ayuda si se siente triste, estresado/a o con miedo.

Con los chequeos preventivos es posible reconocer de manera temprana algunas enfermedades graves y sanar más pronto. Algunos chequeos las paga el seguro de gastos médicos. Otros los tiene que pagar uno/a mismo/a.

También para niños existe un tipo especial de chequeos preventivos, que son muy importantes. Contra enfermedades infecciosas como sarampión, tosferina y paperas hay que ponerse vacunas. Lea más al respecto en nuestro texto informativo “Vivir con niños”.

A partir de los 35 años hay chequeos para la detección temprana de enfermedades de los riñones, el corazón y la circulación, además de cáncer y diabetes. Para las mujeres hay exploraciones mamarias para prevenir el cáncer de mama. Las embarazadas deben someterse a chequeos preventivos de manera regular.

Dependiendo del sexo, la edad o las enfermedades en la familia, se deben hacer ciertas revisiones. Las vacunas son importantes, también para los adultos. Hable con su médico/a.

T Todas las personas en Alemania deben conocer el número telefónico de emergencia de la policía (110) y de los bomberos y paramédicos (112). También hay otros números a los que puede llamar si necesita ayuda y asesoría. Más al respecto, en nuestro texto “¿Qué hacer en caso de emergencia?”.